Greenpeace considera que el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Democrático incumple la ley al reducir la protección del dominio público marítimo-terrestre de la zona. El proyecto vulnera la legislación europea al ubicarse en una zona integrada en la Red Natura 2000, declarada de especial protección. El proyecto abarcaría más de 60.000 m2 con dos nuevas sedes, una en Gernika y otra en Murueta, generando el tránsito de unas 140.000 personas en verano, con el consiguiente impacto en esta zona vulnerable.
La ONG ha formalizado hoy, ante la Audiencia Nacional, la demanda contra el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Democrático del Gobierno de España, así como contra el Gobierno vasco que se ha personado como demandado, por reducir, de 100 a 20 metros, la servidumbre de protección del dominio público marítimo-terrestre de Murueta (Vizcaya), uno de los emplazamientos elegidos para la posible construcción de un nuevo museo Guggenheim en plena reserva de la Biosfera de Urdaibai. Un hecho que la ONG considera ilegal, ya que incumple lo dispuesto por la Ley de Costas.
Y no solo eso, también incumpliría la legislación europea, dado que el proyecto se asentaría en las marismas de Urdaibai, zona integrada en la Red Natura 2000 y declarada de especial protección. Precisamente, la protección de la biodiversidad está siendo tratada estos días en Colombia, donde se celebra la COP16 de la Conferencia de Diversidad Biológica, y esta Reserva de la Biosfera (la única vasca) es Humedal de Importancia Internacional.
El procedimiento ante la Audiencia Nacional, que hoy se formaliza, se inició el 23 mayo de 2024, cuando la ONG presentó el contencioso contra la Orden Ministerial que aprobaba dicha medida. Con esta demanda, que se asienta en el principio de desviación de poder, se da un paso más contra este proyecto de museo que, según se sabe por los medios de comunicación, abarcaría más de 61.000 m2 con dos nuevas sedes, una en Gernika, en la antigua fábrica Dalia, y otra en Astilleros de Murueta, en terrenos ganados a las marismas.
Ambos emplazamientos estarían unidos por una senda que discurriría por esta zona protegida y muy sensible al tránsito de personas (los promotores hablan de 140.000 visitantes en los meses de verano, cuando abriría el museo).
Una ‘ilegalidad’ del Gobierno de España y el Gobierno Vasco
La Ley de Costas demanda que se proteja y se recupere el dominio público marítimo-terrestre pero en este caso el Ministerio, incomprensiblemente, hace justo lo contrario. Además, según las previsiones del IPCC, la zona donde se asienta el proyecto es inundable, debido a la subida del nivel del mar que generará el cambio climático, por lo que la ONG considera que no debe ser el lugar de acogida de ningún proyecto como éste.
La población local necesita una estrategia de desarrollo alineada con el maravilloso entorno natural de Urdaibai y una cultura para todos y todas pero sin destruir la naturaleza. No se puede apostar por proyectos que responden a intereses privados, pero costeados con presupuesto público, sin participación de la ciudadanía y que vayan en su perjuicio, como es el caso.
Esta demanda forma parte de la campaña de ONG y otros colectivos, como la Plataforma Guggenheim Urdaibai STOP, para detener este proyecto, por considerar que pone en riesgo una zona que, por su alto valor ecológico, debería estar especialmente protegida.
Tras la presentación de la demanda por parte de la ONG, la Audiencia Nacional dará traslado del escrito tanto al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico como al Gobierno Vasco para que contesten a la misma.