Luego de impactarnos con estos coches que queman agua, ha quedado demostrado que los motores no tienen que limitarse a combustibles tradicionales, pero ahora veremos algo mucho más impresionante ¡un motor de plasma que devora asteroides! pero ¿de qué se trata?
Un motor que no necesita combustible
Durante muchos años, los científicos han buscado un motor que permita alcanzar mayores velocidades sin depender de combustibles costosos o limitados. Hasta el momento, las alternativas han variado entre combustibles líquidos, energía nuclear y propulsión eléctrica, pero ninguna de ellas ha logrado cumplir todas las metas.
En búsqueda de soluciones un equipo de ingenieros aeroespaciales ha diseñado un nuevo motor de plasma que rompe todos los esquemas, ya que a diferencia de los motores tradicionales no utiliza ningún combustible conocido, sino que funciona con cualquier tipo de metal.
Su nombre es Super Magdrive y su funcionamiento rompe con todo lo que se conoce sobre la propulsión espacial ya que permite que las naves no tengan que volver a la Tierra por falta de combustible, ya que podrían utilizar los cometas, asteroides o ¡cualquier objeto espacial que contenga metales! ¿No es asombroso?
Una investigación prometedora
La investigación es liderada por el científico Minkwan Kim, profesor de la Universidad de Southampton quien indicó lo siguiente:
«Las naves espaciales disponen de cantidades limitadas de combustible debido al enorme coste y a la energía que se necesita para lanzarlas al espacio, pero estos nuevos propulsores son capaces de funcionar con cualquier metal que pueda arder, como el hierro, el aluminio o el cobre».
El motor comenzará su funcionamiento orientado a satélites, pero sus creadores tienen planes de aumentar tanto su tamaño como su potencia en el futuro. Además, el equipo afirma que este motor será capaz de disminuir considerablemente los costos de combustible y reducir el peso de la carga útil, lo que contribuirá a garantizar la seguridad de los satélites en sus trayectorias orbitales.
Un motor de plasma listo para arrancar
El Super Magdrive se basa en la propulsión de plasma, un sistema que calienta un gas hasta transformarlo en plasma ionizado. En este caso, el motor utiliza cualquier metal combustible como fuente de energía.
En una primera etapa, será necesario contar con un motor tradicional, ya que un cohete equipado con este tipo de propulsor no genera suficiente empuje para vencer la gravedad de la Tierra y alcanzar el espacio.
Sin embargo, una vez que la nave ha dejado nuestro planeta y se encuentra en el espacio, los propulsores de plasma son capaces de impulsarla hacia su destino. Además, el sistema aprovecha la energía recolectada por sus paneles solares, la cual se almacena en condensadores para ionizar el metal, descargando esa energía a una velocidad extremadamente alta.
Cada vez más cerca de marte
El primer Super Magdrive fue lanzado con éxito en 2023 a bordo de la misión SpaceX Falcon 9 Transporter-6. Sin embargo, el equipo ya se encuentra trabajando en un propulsor aún más potente que su predecesor.
En este contexto, la NASA tiene planes de implementar estas tecnologías para acortar la duración de los viajes tripulados a Marte.
Con las tecnologías actuales, un viaje de ida y vuelta a Marte tomaría aproximadamente dos años y nueve meses, pero Howe Industries, respaldada por la NASA, busca reducir este tiempo a algo similar a un viaje turístico y para lograrlo, están desarrollando un propulsor de plasma capaz de alcanzar velocidades de hasta 800 000 km/h.
La innovación llegó al espacio
Estas impresionantes tecnologías demuestran que la innovación no tiene que limitarse solo a los coches tradicionales, sino que puede aplicarse ¡incluso a los cohetes de la NASA!
Estas tecnologías no solo transformarán los viajes dentro de nuestro sistema solar, sino que también podrían abrir la puerta a misiones interestelares en el futuro. En conclusión esta tecnología marcará un nuevo capitulo en la historia de la NASA, demostrando que con innovación y compromiso se pueden lograr grandes resultados, como el descubrimiento de esta mina de energía.