El metabolismo basal o tasa metabólica de base es la energía (en calorías) que el cuerpo necesita para poder funcionar, para mantener sus funciones orgánicas vitales, tales como respirar, hacer la digestión o, por ejemplo, para mantener la actividad intelectual. El valor de la tasa metabólica en reposo nos da un dato fundamental de cuántas calorías debemos consumir para mantenernos en el peso ideal y no excedernos en su consumo para no ganar peso.
Así, engordamos si ingerimos más calorías de las que nuestro cuerpo necesita. Además, en el metabolismo de una persona son “importantísimos” los cambios fisiológicos que se produzcan a lo largo de su vida, pero también los cambios o diferentes estados de ánimo.
¿Cambios en el metabolismo?
Seguro que todos hemos oído alguna vez que a alguien se fue a vivir fuera de su país y le cambió el metabolismo o que ‘tras su segundo embarazo le cambió el metabolismo’, y es que, aunque pueda parecer increíble, un simple traslado de ciudad o un cambio hormonal como el que se produce con un embarazo o con la menopausia pueden afectar a nuestra manera de quemar los nutrientes para obtener energía.
Al metabolismo le afectan tres circunstancias que están claramente identificadas: la inflamación, la disfunción digestiva y el desequilibrio hormonal. Muchos expertos también incluyen el estrés emocional, ya que los estados de ánimo condicionan la manera de alimentarnos, de relacionarnos con el medio, y hasta el descanso y horas de sueño y, por ende, el metabolismo.
Hay muchísimos factores que pueden afectar al metabolismo, pero concretando, estos son las más comunes. Además, en muchos casos pueden aparecer separados o mezclados. Una causa inflamatoria puede originar una patología digestiva o al revés y en otra persona una patología hormonal puede dar lugar a un proceso inflamatorio.
La disfunción digestiva y la hormonal son dos de las que más afectan al metabolismo, manifestándose mediante una sintomatología concreta. Síntomas como el cansancio, la fatiga, problemas en la menstruación, amenorrea u ovarios poliquísticos, pueden ser signos de problemas metabólicos.
Alimentos que nos ayudan
Hay algunos alimentos que eran directamente relacionados con la desintoxicación y la activación, atendiendo a las diferentes causas que pueden producir el bloqueo metabólico. Muchos, por no decir casi todos, podrán ser utilizados, sea cual sea el problema con el fin de tener una vida saludable.
Antiinflamatorios
Alimentos para activar el metabolismo si la causa es inflamatoria:
En todos ellos van a confluir distintas propiedades: antiinflamatorias, diuréticas, antioxidantes, activadoras del metabolismo, y sobre todo, depurativas del hígado, riñón, y aparato digestivo, con una laxación suave, para preparar el organismo y empezar la eliminación de toxinas.
Estos alimentos son: melón, pepino, arándanos, apio, espinacas, brócoli, granadas, zanahoria, lenguado, alga wakame.
Digestivos
Alimentos para activar el metabolismo si la causa es de origen digestivo:
Son alimentos facilitadores de la digestión, alcalinizantes, que nos ayuden a reducir el tiempo de paso por el intestino, protectores de las mucosas y activadores de una digestión que nutra, pero no inflame.
Estos alimentos serían: semillas de chía, cayena, hinojo, peras.
Hormonales
Alimentos para activar el metabolismo si la causa es de origen hormonal:
Son alimentos que ayudan específicamente a controlar el desequilibrio hormonal, bien por poseer sustancias que regulen estos componentes hormonales o por poseer cofactores, vitaminas, antioxidantes y las enzimas necesarias para la formación de hormonas y el buen funcionamiento hormonal», añade.
Destacan en este ámbito: aguacate, alga chlorella, melocotón, cilantro, semillas de lino, ciruelas, rábanos picantes, maca, hongos shiitake.
Activadores
Alimentos activadores metabólicos: los quemagrasas
Son alimentos que destacan por su bajo nivel calórico y alto contenido en fibra y agua, son perfectos para dietas de adelgazamiento o mantenimiento.
Estos son algunos de ellos: kale, mango, limón, endibias, cúrcuma, cítricos, cereales enteros (integrales), pollo o huevos, el agua de coco.