En pleno proceso de descarbonización, ha surgido un superdeportivo eléctrico conducido por inteligencia artificial que supera todo lo expuesto hasta ahora por los gigantes Tesla y BYD. La tecnología cada vez nos sorprende más, sobrepasando límites que antes solo existían en nuestra imaginación. Uno de ellos es la fantasiosa, pero cada vez más palpable, conducción autónoma.
La sola posibilidad de que pueda instaurarse de forma definitiva nos hace vislumbrar una nueva realidad de transporte. Una en la que los vehículos inteligentes pasan a tener el control para convertir al ser humano en un mero observador de la movilidad. Ya han aparecido varias propuestas equipadas con avanzados sistemas de sensores y algoritmos de inteligencia artificial.
El uso de inteligencia artificial y conducción autónoma brindan beneficios significativos que pueden cambiar radicalmente la experiencia que vivimos cuando vamos en carretera. En primer lugar, la aspiración es que esta tecnología mejore la seguridad vial al instaurar sistemas avanzados de detección y respuesta que puedan prevenir accidentes de tráfico.
Asimismo, se pretende que ofrezca accesibilidad al transporte, además de reducir los niveles de estrés. Todos estos objetivos parecen estar más cerca que nunca con el surgimiento de un superdeportivo eléctrico que deja a Tesla y BYD a un lado.
Este superdeportivo eléctrico cumple lo inimaginable: la inteligencia artificial está detrás
Hablamos del nuevo modelo Jiyue Robo X, el primer coche eléctrico conducido por inteligencia artificial. Este modelo futurista es uno de los más avanzados en el uso de la conducción autónoma, razón por la que los aficionados a este concepto no dejan de mirarlo una y otra vez. Es capaz de llegar a los 100 km/h en tan solo dos segundos, convirtiéndolo en una de las piezas más rápidas del mundo.
Sus creadores se han esmerado en confeccionar un vehículo elegante y fino, atractivo a simple vista. De por sí esto ya consigue acaparar la atención de sus potenciales clientes al ritmo de sus líneas angulosas y dinámicas, con una altura acotada que lo convierte en el coche vanguardista eléctrico por excelencia.
Cada aspecto de este vehículo se potencia al vislumbrar su desarrollo ligero, con recursos de primera calidad y fibra de carbono. La firma ha focalizado sus esfuerzos en superar a los modelos Jiyue 01 y Jiyue 07, que en su momento continuaron con la misma tendencia y base, sin muchas alteraciones. Sin embargo, el nuevo Jiyue Robo X va por otro camino.
Para sacar adelante este proyecto, quisieron aportar unas discretas aperturas en sus laterales que permiten que el motor refrigere y tenga, al mismo tiempo, una importante carga aerodinámica, haciendo posible que sea seguro en plena circulación.
Un antes y un después para las piezas eléctricas que no podemos evitar comparar con el coche eléctrico que raya la perfección y viene de Asia.
La inteligencia artificial se apodera del coche eléctrico: estamos más cerca que nunca de la conducción autónoma
Uno de los secretos mejor guardados de esta pieza radica en su interior, sobre todo en su “corazón”, compuesto por cuatro motores independientes eléctricos que se hallan cada uno en una rueda, con los que puede llegar a producir una potencia total de hasta 1200 CV.
Asimismo, esta unidad llega a una velocidad máxima de 350 km/h, alcanzando una autonomía máxima de 644 km con una sola carga, aunque esto solo se cumple dentro del ciclo chino, el CLTC, que en el europeo es más fiable.
El aspecto más llamativo de este coche eléctrico es la evolución de su tecnología. Dispone de una inteligencia artificial nueva creada por parte de Geely y Baidu, que permite que pueda optimizarse la eficiencia y la seguridad al volante.
Con los cambios implementados en la centralita, se puede lograr una conducción autónoma de nivel 4, debido a la interiorización de los hábitos del conductor y cambios en la suspensión, que permiten que sea posible anteponerse a posibles peligros en circulación.
Tesla y BYD no han logrado lo que este coche eléctrico sí: la inteligencia artificial es su secreto
Según consigna Innovant, “la producción en masa no se espera hasta 2027”. Sin embargo, los obstáculos políticos y posibles restricciones a las tecnologías chinas podrían retrasar los planes. Por otra parte, la web Espíritu RACER recoge que “este coche tendrá un precio de 1.1 millones de euros aproximadamente”.
La previsión actual es que solo llegue al mercado chino, aunque la compañía prevé llevarlo a Europa en los próximos años. Pase lo que pase, está claro que esta marca de China está dispuesta a plantarle cara a Tesla con un coche que utiliza inteligencia artificial.
El superdeportivo eléctrico conducido por inteligencia artificial puede ocupar el rol que ni Tesla ni BYD han sabido tomar hasta ahora. Mientras tanto, esta marca fabrica un coche eléctrico cada 76 segundos. Otro importante hito inspirador del sector.