Los coches eléctricos están en boca de todos. El problema es que aún hoy, cuando las ventas de este tipo de vehículos se disparan, a muchos conductores todavía les asaltan las dudas y tiene muchas incógnitas por resolver.
Por eso, desde ECOticias.com creemos que darle a las preguntas más frecuentes y comunes, una respuesta concreta y concisa, es la mejor manera de ayudar a los futuros compradores a decidirse por una opción de movilidad eléctrica que no solo le ayuda a los usuarios, sino que es muy benéfica para el medio ambiente.
¿Por qué son más caros?
La compra de algún modelo de coches eléctricos es más onerosa que la de uno con motor térmico. Un híbrido tiene un margen menor de diferencia, pero aun así resulta más costoso. Y la explicación es de lo más sencilla: la tecnología eléctrica es más cara. A medida que se popularice su uso, los costes se reducirán. Y la expectativa es que, en breve, sean económicamente asequibles para la mayoría de las personas.
¿Cuánto dura la batería de un coche eléctrico?
La durabilidad depende del uso y de la calidad de la batería. Se estima entre de 8 y 10 años o 150/160.000 kilómetros o unos 3000 ciclos de recarga. Pero el deterioro de una batería depende de otros factores, además de las cargas, la edad o el recorrido. La frecuencia de las cargas y el tipo de infraestructura que se emplee también son determinantes.
¿Es rentable conducir coches eléctricos?
Los expertos estiman que, comprando coches eléctricos en vez de los que emplean motores térmicos, los usuarios se ahorran al menos 500 euros anuales, solo en gasto de combustible. A ello hay que sumarle que los costes de mantenimiento son significativamente menores, que en muchos sitios aparcan gratuitamente y muchas ventajas más, por lo que el ahorro es aún mayor.
¿Los coches eléctricos serán reciclables?
Los coches eléctricos ya emplean materiales reciclables y reciclados. El único escollo a superar en este sentido son las baterías, ya que por ahora recuperar sus elementos está siendo además de complicado, poco rentable. Pero este es uno de los sectores en los que la industria más está invirtiendo.
¿Su autonomía es un problema?
Decididamente no. Los rangos de duración de las baterías son cada vez mayores. Y las infraestructuras de carga rápida se multiplican. Por otra parte, no hay que olvidar, que al igual que en el caso de los térmicos, cuando hace falta una carga, el vehículo lo avisa. Y un europeo medio no recorre ni la mitad de los kilómetros que cada día podría hacer con una carga completa, aun en el caso de los coches eléctricos con menores tiempos de carga.
¿Qué pasará con el consumo de energía mundial?
Los expertos consideran que por cada millón de coches eléctricos habrá un incremento significativo en el consumo de energía mundial. Por eso recomiendan que las energías renovables sean la fuente principal de los sistemas de recarga. Especialmente en el caso de las electrolineras, las que se instalen en espacios públicos y los aparcamientos, etc.
¿Qué conectividad tendrán?
Los coches eléctricos que en la actualidad están en el mercado ya cuentan con un alto grado de conectividad. Los ordenadores de a bordo, además de controlar todos los factores internos del vehículo, pueden conectarse a Internet, intercambiar datos, recibir información en tiempo real, etc. Y se espera una mejora sustancial de estas tecnologías para los próximos modelos.
¿Se seguirá subvencionando su compra?
No. La realidad es que llegará un momento en el que las subvenciones y ventajas fiscales que se ofrecen en la actualidad para adquirir este tipo de vehículos, dejen de tener una razón de ser y se acaben. Se espera que esto acontezca cuando los coches eléctricos sean la opción mayoritaria a la hora de adquirir un vehículo o quizá, cuando los de motor térmico dejen de fabricarse por completo.